En otro nuevo episodio de las visitas al juzgado a las que obliga la nefasta política de personal llevada a cabo por el Ayuntamiento de Estepona, en este caso los juzgados de lo social, han condenando al Ayuntamiento de Estepona al pago del complemento salarial recogido en el convenio colectivo y de aplicación a todo el personal municipal. Por ello desde los sindicatos que iniciaron el pleito, CSIF y ATAE, se ha solicitado vía registro de entrada que en la próxima nómina del mes de marzo se proceda al abono de las cuantías adeudadas y que rondan los 1000 € por empleado.
La sentencia que ya es firme y contra la que no ha recurrido el Consistorio en el plazo de 5 días establecido para ello, dice textualmente: “ se condena al Ayuntamiento de Estepona al abono del Programa de Productividad por Puntualidad y Reducción del Absentismo Laboral del año
Tras esta condena solo cabe el acatamiento y el pago, lo contrario podría ser considerado una desobediencia y además generaría el pago de intereses ya que esta deuda se arrastra desde septiembre de 2009. Por ello CSIF y ATAE consideran que debe ser esta Corporación la que afronte las consecuencias de esta resolución judicial, pues solo a su negligente gestión puede achacarse tal fallo judicial, no debiendo ser la próxima corporación salida de las urnas la que solucione un problema que no ha generado.
Por otro lado reprueban el uso partidista e interesado que CCOO hace de este y de otros asuntos, al no defender los intereses y derechos de los empleados no promoviendo la presentación de las oportunas denuncias cuando era el momento y si ahora que ya es tarde. Además vendiendo falsos acuerdos que solo han servido para posponer dos años el pago de una deuda que debía estar más que pagada. Otro caso en el que dicho sindicato no cuenta toda la verdad es en el de la subrogación de trabajadores de las empresas a los que se lleva mintiendo y utilizando casi una década a cambio de mantener privilegios y obtener prebendas.
Ejemplos ilustrativos del proceder de dicho sindicato, y también del otro grande, ambos llamados sindicatos de clase y nunca mejor dicho ya que solo defienden a la clase política y a la clase sindical acomodada, los escándalos que vienen destapándose en