Las obras para el proyecto de conservación y recuperación del Castillo de San Luis, una fortaleza costera construida en el último cuarto del siglo XVI cuyos restos se encuentran en el centro histórico de la ciudad, han entrado en su fase final y se espera que concluyan el próximo mes de junio.
El objetivo de la intervención, promovida por el actual equipo de gobierno, es recuperar este enclave que ha permanecido oculto y sin uso durante casi un siglo, y transformarlo en un centro museístico. Para ello, se instalará una cubierta sobre los restos arqueológicos que no será visible desde el exterior, permitiendo el uso del espacio interior como sala museo. El proyecto ya está ejecutado en un 75% y actualmente se está trabajando en la cubierta, que se construye con tres capas de mortero.
Además, el recinto contará con una pasarela que facilitará a los visitantes recorrer el interior del castillo y contemplar los restos de las distintas fases históricas del edificio que han sido descubiertas durante las excavaciones arqueológicas.
La recuperación del Castillo de San Luis ha sido adjudicada a la empresa Grafeno Inversiones, S.L.U. por un importe de 531.795 euros (IVA incluido), financiados a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia-Fondos Next Generation EU. El proyecto contempla dos fases de intervención. La primera ha consistido en la limpieza, conservación, estabilización y consolidación de los restos existentes, así como la eliminación de los elementos vegetales adosados a la estructura. La segunda fase se centra en la puesta en valor de los restos del castillo, utilizando su valor histórico-arquitectónico-arqueológico para la explicación e interpretación del bien.
En las próximas semanas se completarán los trabajos de limpieza, retirada de andamiaje y colocación de la puerta de acceso, una vez finalizada la obra principal.
Finalmente, el proyecto prevé la instalación de varios paneles y elementos audiovisuales didácticos para ayudar en la interpretación del entorno del castillo, así como un espacio para exhibir colecciones de interés histórico.
Esta actuación en el Castillo de San Luis es de gran importancia, ya que permitirá dar a conocer varios siglos de la historia de Estepona mediante la visita al monumento. Ofrecerá a la sociedad un espacio lleno de historia que incluye suelos del siglo XVI, muros del XVIII, e incluso piezas más antiguas. El proyecto es socialmente responsable y accesible para personas con movilidad reducida, además de ser una intervención inteligente que maximiza sus posibilidades mediante el uso de nuevas tecnologías.
El Castillo de San Luis de Estepona, construido en el último cuarto del siglo XVI en el marco de la reorganización de la defensa de la costa occidental malagueña tras la rebelión morisca de 1568, tenía como propósito reforzar el frente sur de las murallas de origen islámico y dominar el fondeadero natural de la playa de La Rada. Sus elementos más destacados incluían tres baluartes artilleros y una gran plaza de armas porticada con varios cuarteles.
A mediados del siglo XVIII, el castillo sufrió una importante transformación y se reestructuró como batería cañonera. Tras los daños causados por el terremoto de Lisboa en 1755 y las voladuras provocadas por los franceses en 1812, gran parte del castillo se abandonó y cayó en ruina, sobreviviendo solamente la batería cañonera, que se incorporó como patio a una vivienda construida a finales del siglo XIX.