El proyecto de remodelación integral y puesta en valor del casco antiguo de Estepona ha renovado en los últimos 3 años más de 13 kilómetros de calles. Éste se ha convertido en uno de los proyectos más ambiciosos que ha llevado a cabo el actual equipo de gobierno y que ha conseguido cambiar, radicalmente, la imagen de Estepona.
Según ha explicado el alcalde, José María García Urbano, “la idea no era otra que recuperar un casco antiguo que estaba muy deteriorado y convertirlo en uno de los más bonitos de toda Andalucía”. Las obras no sólo han consistido en la renovación superficial, apuntó el alcalde, sino que “ha sido una remodelación integral de las calles en las que, además, de un nuevo pavimento y ornamentación, se han renovado las redes del subsuelo que, en muchas calles, llevaban más de 50 años sin recibir ningún tipo de mejora”.
El regidor apuntó que el plan de embellecimiento del casco antiguo ha incluido la colocación de unas 7.500 macetas y 992 macetones en las calles que han sido remodeladas. “Con esta ornamentación se consigue mantener el tipismo andaluz de calles blancas y coloridas macetas que los propios vecinos se encargan de cuidar”. En este sentido, García Urbano aseguró que “este proyecto no sólo ha permitido la creación de nuevos puestos de trabajo en el municipio sino que a medio y largo plazo está favoreciendo la creación de nuevos negocios que ven en el casco histórico el lugar ideal para implantar para desarrollar sus actividades económicas”.
La última calle en sumarse a este proyecto ha sido la céntrica calle Casares cuyas obras acaban de concluir. Esta emblemática vía estará preparada para albergar los actos principales del día del patrón, San Isidro Labrador, que se celebra el 15 de mayo y en el que la calle Casares se convierte cada año en el centro neurálgico de esta celebración. El Consistorio ha conseguido un ahorro de un 32,14 por ciento en el presupuesto de estas obras que han renovado una de las calles más emblemáticas del casco antiguo. Esta reducción ha sido posible gracias al procedimiento de subasta pública que ha impulsado el Consistorio, por lo que los trabajos se adjudicaron a la empresa que garantizó ejecutarlos por el menos presupuesto.
Así, se ha conseguido que los trabajos, que fueron licitados por 165.143 euros, se hayan realizado, finalmente, por la empresa Vimac por 112.072 euros, lo que supone una rebaja de 53.071 euros. El alcalde ha indicado que este ahorro para las arcas municipales se debe también a la alta participación en este concurso público, ya que han sido un total de 28 empresas las que presentaron oferta. En este sentido, García Urbano ha apuntado que el Consistorio “goza ahora de una credibilidad, que hace que sean muchas las entidades interesadas en ejecutar obras municipales”. “El rigor a la hora de efectuar los pagos y el hecho de contratar tan sólo lo que permiten las cuentas públicas ha dado lugar a que en nuestras licitaciones concurran un importante número de empresas, y por tanto que se obtengan considerables reducciones en los presupuestos”.
Los trabajos realizados en la calle Casares han supuesto una reforma de las infraestructuras y su pavimentación. Además, se han ejecutado actuaciones de embellecimiento, tal y como viene sucediendo en todas las obras que se acometen en el casco antiguo, y se han renovado las redes de abastecimiento de agua potable y de aguas residuales. La calle seguirá estando abierta al tráfico rodado pero se eliminan los aparcamientos. A cambio, se colocarán aceras para favorecer el tránsito de los peatones.
“Con las obras de la calle Casares son ya 66 las calles del centro histórico que se han visto reformadas, integralmente, dentro del proyecto Jardín de la Costa del Sol”, ha añadido la concejala del área FIT. “Esta iniciativa, que no hubiera sido posible sin la colaboración de los vecinos, ha supuesto el acondicionamiento de más de 12 kilómetros de superficie del casco antiguo”, ha continuado Velasco.