El pasado 20/5/2015 la Dirección de la empresa OCIOGEST MARBELLA SA, perteneciente el grupo hotelero el FUERTE HOTELES, comunicó a los trabajadores de la plantilla su intención de iniciar un procedimiento de despido colectivo que supondrá la extinción de la totalidad de la plantilla afectando a 17 trabajadores en el centro de trabajo de Marbella.
Esta empresa perteneciente a dicho grupo empresarial motiva la extinción del centro deportivo y el gimnasio (CLUB FUERTE SPORT) alegando causas productivas y organizativas pero aduce que tendrá que cerrar el establecimiento y despedir a los trabajadores pese a justificar beneficios empresariales en el presente ejercicio económico, no solo en ésta empresa sino del propio grupo de empresas. Pese a que el FUERTE HOTELES es una de las principales cadenas hoteleras andaluzas con siete establecimientos repartidos en Marbella, Estepona, Torrox, Grazalema, Conil de la Frontera y El Rompido (Cartaya) o que el grupo ha sido incluido recientemente en el programa de hoteles sostenibles ‘EcoLíder’ de TripAdvisor, extingue sin causa legal a dichos trabajadores con fecha de efectos desde el próximo día 29/6/2015.
Recientemente el propio grupo FUERTE HOTELES anunció la inversión de 6 millones de euros para acometer una profunda reforma del Fuerte Miramar de Marbella, por ejemplo, con el objetivo de especializarse en el segmento vacacional para adultos; parte de esa financiación procede del crédito concedido a la cadena por Caixabank. Como informó HOSTELTUR noticias de turismo el pasado 4/6/2015, FUERTE HOTELES obtiene 23 M € de financiación por parte de CaixaBank. Los propios trabajadores han venido denunciando a lo largo de estos dos últimos años la mala gestión del CLUB FUERTE SPORT, una errónea política en la gestión de precios, una desatención a las quejas planteadas por los socios y el propio beneficio empresarial de esta sociedad OCIOGEST MARBELLA SA y han solicitado continuar trabajando; la decisión de extinguir los 17 puestos de trabajo y del propio cierre del gimnasio el fuerte no es un medio hábil para asegurar la viabilidad, no es causa legitimadora de la decisión extintiva, siendo importante que el cierre empresarial no constituye una medida racional en términos de eficacia y eficiencia de la organización de la empresa que cesará su actividad.