El punto limpio está ubicado en la zona de Peñarrubia, junto a la salida de la carretera de Jubrique, una vez concluidas las obras del vial de acceso y el correspondiente asfaltado y la instalación de señales verticales y horizontales, y subsanados los desperfectos ocasionados por diversos actos vandálicos ocasionados en las instalaciones.
El Ayuntamiento firmó un convenio con la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental para que este organismo sea el encargado de gestionar estas infraestructuras.
La construcción de este punto limpio se enmarca dentro del convenio de colaboración suscrito por la Consejería de Medio Ambiente y la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental y ha supuesto una inversión inicial de 546.408 euros. Esta iniciativa se ha realizado también de acuerdo con el Plan Director Territorial de Gestión de Residuos Urbanos de Andalucía, aprobado por Decreto en 1999 y en cumplimiento de la Ley de Protección Ambiental.
La nueva instalación, construida sobre una parcela cedida por el Ayuntamiento de 2.634,24 metros cuadrados, cuenta con recintos de recogida selectiva y específicos, dotados de viales, áreas de carga y descarga, así como con contenedores para residuos específicos y cerramiento perimetral. Además, en este caso se ha complementado, dada la cantidad y tipología de residuos, con una oficina de control, con un muelle de descarga y una pequeña nave de almacenamiento de residuos domiciliarios peligrosos.
Para aceites minerales usados y aceites de freidora se dispone en la zona de residuos especiales con dos tanques de 600 litros de capacidad. Para aerosoles, este punto limpio cuenta con contenedores con ruedas estándar normalizados de polietileno de 240 litros de capacidad. Para las baterías usadas existe un contenedor de 750 kilogramos. Para los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos se dispone de un contenedor de jaula de acero, donde se han de depositar residuos de la llamada línea gris (equipos de ofimática, ordenadores, monitores, etc.) y de línea marrón (televisores, equipos de audio y vídeo, teléfonos, etc.).
En lo referente a residuos de pinturas y disolventes, se ha colocado un bidón de polietileno de doble pared y 200 litros de capacidad, mientras que para los envases de pinturas se dispone de un arcón de polietileno de 600 kilos. Para los envases y repuestos motor hay un arcón de polietileno también de 600 kilogramos de capacidad.
Por último, los residuos de vidrio se recogen en un contenedor tipo iglú, idóneo para la recogida de pequeñas cantidades aportadas por particulares; para el textil, un contenedor de polietileno para la recogida de ropa usada; y para los fluorescentes, un contenedor también polietileno. Para las radiografías y fotografías, se dispone de un contenedor estándar, estabilizado ante radiación ultravioleta y agentes atmosféricos.